FILADELFIA.-¿Qué hará falta para que Bryce Harper vuelva a ser un jugador de élite?
Entre las muchas interrogantes que enfrentan los Filis en este invierno tan decisivo, esa no era una que se esperaba escuchar. Sin embargo, se convirtió en un tema importante de conversación después de que el presidente de operaciones de béisbol de Filadelfia, Dave Dombrowski, se preguntara en voz alta durante su conferencia de prensa de fin de año si Harper podría volver o no a su nivel “de élite”.
El propio Harper respondió unos días después. Incluso su agente, Scott Boras, intervino.
“Denle a Bryce Harper más lanzamientos para batear”, dijo Boras, “y las métricas demostrarán que todo lo que buscan se cumplirá”.
Claro, ver mejores pitcheos forma parte de la ecuación, pero eso tampoco es algo nuevo para Harper.
Entonces, ¿qué haría falta realmente para que Harper vuelva a ser, bueno, un jugador de élite? Analicémoslo un poco más a fondo.
Hacer menos swings contra lanzamientos fuera de la zona
Esto suena sencillo, pero tiene varias capas.
Primero, hablemos un poco más sobre la falta de buenos lanzamientos para batear. En ese sentido, apenas el 43% de los lanzamientos que Harper vio esta temporada estuvieron dentro de la zona de strike —el porcentaje más bajo entre 532 jugadores (mínimo de 200 lanzamientos).
El instinto es atribuir eso a la falta de protección de Harper en el orden al bate. Con Harper bateando principalmente tercero esta temporada, los cuartos bate de los Filis combinaron un OPS de .720 (20mo en Grandes Ligas).
Dicho esto, el porcentaje de lanzamientos en la zona que vio Harper en el 2025 fue en realidad ligeramente más alto que en sus primeras seis campañas en Filadelfia, cuando apenas el 42.6% de los lanzamientos que enfrentó estuvieron en la zona de strike. Solo el agresivo Javier Báez tuvo un porcentaje más bajo de lanzamientos en la zona entre el 2019 y el 2024.
La diferencia este último año fue que Harper tuvo mucha menos paciencia.
Harper hizo swing al primer lanzamiento el 54.1% de las veces. Eso no solo estuvo muy por encima de su promedio de por vida (42.6%), sino que –entre los 309 jugadores con al menos 250 visitas al plato la temporada pasada– el único jugador en las Mayores que hizo swing al primer lanzamiento con más frecuencia fue su compañero de equipo Nick Castellanos (56.5%).
Además de eso, Harper tuvo una tasa de swings contra pitcheos fuera de la zona del 35.6%, apenas por debajo de su tope personal (35.7% en el 2022).
En su temporada de JMV de la Liga Nacional en el 2021, Harper tuvo una tasa de swings contra pitcheos fuera de la zona de apenas 24.8%. En su otra campaña de JMV con los Nacionales en el 2015, su tasa de swings contra lanzamientos malos fue de 25.6%, y eso a pesar de que apenas el 40.7% de los pitcheos que vio estuvieron en la zona.
¿Quizás Harper les hizo swings a más lanzamientos fuera de la zona en el 2025 porque se sintió obligado a producir ante las dificultades de los bateadores que lo seguían? ¿Quizás haría menos swings ante pitcheos malos en el 2026 con más protección en la alineación?
Solo el tiempo lo dirá.
Hacer más daño con los lanzamientos bateables
Independientemente de su tasa de swings contra pitcheos fuera de la zona, Harper siempre ha sido el tipo de bateador que castiga a los lanzadores rivales por casi cualquier error -pero ese no fue el caso en el 2025.
Harper bateó .296 con un porcentaje de slugging esperado (xSLG) de .597 ante lanzamientos dentro de la zona la temporada pasada. Aunque es una cifra respetable, está muy lejos de su temporada de JMV en el 2021, cuando bateó .346 con un .765 xSLG en lanzamientos dentro de la zona.
Pero ahora consideremos lo que Harper hizo contra lanzamientos realmente bateables.
Del 2019 al 2024, Harper bateó .384 con un porcentaje slugging de .837 en lanzamientos por el centro del plato. Solo Shohei Ohtani y Aaron Judge tuvieron un slugging más alto en ese tipo de lanzamientos.
En el 2025, sin embargo, Harper bateó apenas.303 con slugging de .652 contra lanzamientos por el medio del plato —aún bueno, pero no precisamente“de élite.”
Hits en momentos clave
Por supuesto, cualquier debate sobre si un jugador es “de élite” siempre implica cierto grado de percepción. En el caso de Harper, su capacidad para rendir en los momentos grandes siempre ha sido parte de su mística.
Durante sus primeras seis temporadas con los Filis (2019-24), Harper tuvo un OPS increíble de 1.197 con dos outs y corredores en posición de anotar —el mejor de todo MLB por amplio margen. Y en los escenarios más importantes, también lideró a todos los bateadores calificados con un OPS de 1.153 en la postemporada durante ese mismo período.
Pero esta última temporada, Harper bateó apenas .172 (10 hits en 58 turnos) con un OPS de .575 con corredores en posición de anotar y dos outs. No conectó ni un solo jonrón en esa situación –la primera vez que eso ocurre desde el 2014.
Luego, Harper se fue de 15-3 (.200) con un OPS de .600 durante la breve participación de los Filis en la postemporada.
Aún está por verse si la producción de Harper vuelve a esos niveles previos la próxima temporada, pero sin importar lo que suceda este invierno, probablemente no deba contar con ver más strikes el año que viene.
La clave será dejar pasar más lanzamientos fuera de la zona —y aprovechar los pocos errores que reciba sobre el plato.









